Los agricultores españoles se quejan a Europa de que Marruecos vende sus tomates más baratos que ellos, sin respetar el acuerdo de precios mÃnimos. Parece como si a los agricultores de nuestro paÃs vecino no les importara ganar menos para vender más. Es decir, que no acatan los aranceles aduaneros (ellos los tienen que vender más caros mientras que nuestra agricultura está subvencionada, justo, ¿no?). Sin embargo, el precio de las importaciones no lo ponen los agricultores, sino los que los distribuyen. Es decir, que agricultores de ambos paÃses han de vender sus tomates a un precio que ellos no han elegido y que, al menos en el caso de España, puede llegar a ser menos que el precio de coste. Esto pone de relieve que el problema no es que los agricultores marroquÃes compitan con nosotros, sino que un sistema de competencia nos obliga a competir entre nosotros. O, lo que es lo mismo, los distribuidores compiten entre sà para ver quién obtiene más beneficios y deja menos beneficios para los agricultores. Es decir, que mientras que ambos salen perdiendo si compiten entre sÃ, ambos saldrÃan ganando si pueden fijar sus precios para tener un margen de beneficios mÃnimo.
Por ello, los grupos de consumo son una alternativa interesante: sin competencia entre agricultores, beneficios dignos, agricultura ecológica… ¿A qué esperas? ¡¡Cambiemos la agricultura del paÃs!! Si te interesa el consumo responsable y la agricultura ecológica promueve la creación de un grupo de consumo. EscrÃbenos a decrece.madrid@gmail.com si tienes dudas de cómo hacerlo o de si hay algún grupo de consumo cerca de tu casa. Nosotros te asesoramos y te explicamos lo necesario.
¡Salud y buenos alimentos!