Arcadi Espada, presidente del Instituto Ibercrea, tiene como misión sacar adelante la Ley Sinde y proteger los intereses de la SGAE, AGEDI, AIE y CEDRO. Dado el reciente fracaso de la Ley Sinde, Arcadi teme por su estabilidad laboral. Por eso ha creado la campaña No les ayudes a mandarme al paro.
La campaña tiene un mensaje simple:
Los 885 internautas que hemos perdido nuestro trabajo y nuestro dinero, o podemos perderlo, a causa de los millones de descargas no autorizadas, te pedimos que nos ayudes a evitarlas.
Hay mucha gente que puede perder su trabajo por culpa de las descargas. Por ejemplo, el villano de Supermán, Lex Luthor, ha sido de los primeros en firmar la petición de socorro de Arcadi Espada. A Luthor le han seguido decenas de trabajadores preocupados por la amenaza que las descargas suponen para su futuro laboral. Otros ejemplos del daño que puede haber causado la negativa de aprobar la Ley Sinde son los ocho jubilados y las tres amas de casa que ven peligrar su futuro profesional por culpa de las descargas, eso sin contar a los estudiantes, funcionarios, enfermeras, profesores, soldadores, esteticistas y camareros que también avisan del riesgo que corren. Llamativo nos parece que haya una persona cuya profesión sea “persona ética” y nos preocupa que, por no haberse aprobado la ley, pueda dejar de serlo.
También firma José Manuel Tourné, director general de la Federación para la Protección de la Propiedad Intelectual (FAP). Entendemos su preocupación ya que su trabajo a tiempo completo consiste en hacer lobby a sueldo de las multinacionales de la industria del entretenimiento. Si las descargas no disminuyen rápido, las multinacionales que financian a Tourné dejarán de pagarle para hacer lobby. Como Tourné, también se echa las manos a la cabeza Juan Carlos Tous de la Prada, director general de la Asociación Videográfica Española Independiente y director de filmin.
Desde Hacktivistas comprendemos las preocupaciones de estos trabajadores, ¡pero no temáis! Vuestra estabilidad laboral no depende de las descargas ni de la Ley Sinde, sino de la capacidad de vuestras empresas para adaptarse a los nuevos tiempos y, por supuesto, del Gobierno y toda la sociedad para renovar el modelo productivo. Internet será un aliado, y no un enemigo, si vosotros lo queréis así.